Artículo sustraído de Canarias Deportiva.com que refleja cómo afectará probablemente la crísis si nadie lo remedia al fútbol base la temporada que viene 2011-2012. Es una pena que siempre paguen los más débiles mientras los políticos siguen gastando dinero del contribuyente a espuertas en otras cuestiones que a la mayoría de los mortales ni tan siquiera nos interesa.La palabra crísis también llega en forma de escarnio a los mentideros del fútbol base, especialmente en la provincia de Las Palmas. Los clubes de fútbol están en periodo de máxima alerta ante las noticias provenientes desde la Federación Interinsular de Fútbol de Las Palmas donde han dejado caer el hecho que los clubes tendrán que afrontar, si no lo remedia una medida sensata, el pago de la Mutualidad de futbolista para la próxima campaña. Un hecho que ha puesto el sistema nervioso de los clubes en forma de amenaza o abandono de la competición para el próximo inicio de temporada ante el costo que supondría este suplemento para las maltrechas arcas de las entidades deportivas.
La retirada de la totalidad de la subvención que hasta el momento se llevaba a cabo y desde el año 2002 por parte de la obra social de La Caja de Canarias ha puesto contra las cuerdas el inicio de la disputa del campeonato en edad escolar en las categorías de Benjamines a Cadetes. Un hecho que trae de cabeza a los máximos gestores de los clubes que buscan alternativas para poder dar cobertura a los jovenes deportivas.
El pasado año vieron los clubes como se les subía el costo de dicha Mutualidad para cubrir efectos, un hecho que motivó la retirada de algunos equipos ante la imposibilidad de dar cobertura sanitaria a los deportistas. Ahora con este anuncio en forma de amenaza ha hecho saltar todas las alarmas y todo indica que habrá episodios de desencuentros ya que los directivos de los clubes no están dispuestos a aceptar una cuota de pago del cien por cien ante la carencia económica de las entidades.
De momento las instituciones callan, absorvidos por el fragor de la campaña electoral en ciernes pero no deja de ser preocupante para todos aquellos metidos en la digna batalla de dar formación deportiva y social a los jovenes que practican este bello deporte el hecho que a estas alturas del año, se vuelva a tocar un tema que en los últimos años ha sido la comidilla del ente federativo ante los desajustes presupuestarios motivados por los desorbitantes costes sanitarios en la cobertura de la Mutualidad Deportiva.
Ante ello la amenaza de paralización del inicio del campeonato para la próxima campaña está en el candelero y tan solo la cordura debe prevalecer entre los máximo gestores de las entidades en ciernes para evitar una mala imágen de falta de sensibilidad en el que se considera deporte rey de nuestra comunidad y el juego con la ilusión de los más pequeños.
La retirada de la totalidad de la subvención que hasta el momento se llevaba a cabo y desde el año 2002 por parte de la obra social de La Caja de Canarias ha puesto contra las cuerdas el inicio de la disputa del campeonato en edad escolar en las categorías de Benjamines a Cadetes. Un hecho que trae de cabeza a los máximos gestores de los clubes que buscan alternativas para poder dar cobertura a los jovenes deportivas.
El pasado año vieron los clubes como se les subía el costo de dicha Mutualidad para cubrir efectos, un hecho que motivó la retirada de algunos equipos ante la imposibilidad de dar cobertura sanitaria a los deportistas. Ahora con este anuncio en forma de amenaza ha hecho saltar todas las alarmas y todo indica que habrá episodios de desencuentros ya que los directivos de los clubes no están dispuestos a aceptar una cuota de pago del cien por cien ante la carencia económica de las entidades.
De momento las instituciones callan, absorvidos por el fragor de la campaña electoral en ciernes pero no deja de ser preocupante para todos aquellos metidos en la digna batalla de dar formación deportiva y social a los jovenes que practican este bello deporte el hecho que a estas alturas del año, se vuelva a tocar un tema que en los últimos años ha sido la comidilla del ente federativo ante los desajustes presupuestarios motivados por los desorbitantes costes sanitarios en la cobertura de la Mutualidad Deportiva.
Ante ello la amenaza de paralización del inicio del campeonato para la próxima campaña está en el candelero y tan solo la cordura debe prevalecer entre los máximo gestores de las entidades en ciernes para evitar una mala imágen de falta de sensibilidad en el que se considera deporte rey de nuestra comunidad y el juego con la ilusión de los más pequeños.
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